24 febrero 2006

MUNDO DE EXTREMOS

Vivimos en un mundo de extremos. Cuando veo las noticias, lo único que acierto a reconocer es un grupo de personas que tiran egoístamente hacia un lado con todas sus fuerzas, mientras otros tratan de alejarse rápidamente hacia el otro lado. Independientemente de tu postura, lo importante es que parezca estar lo más alejada posible de la de tus contrarios.
El anarcofascismo es un concepto con mucho acierto. Trata de reflejar un mundo de contradicciones, en el que el más liberal, puede convertirse a la más terrible de las dictaduras.
Un anarcofascista, si lo vemos positivamente, es una persona con una mentalidad de izquierda a derecha. En él, tienen cabida todo tipo de ideales, moralidad, fines y principios. Desconozco si este tipo de personajes tendrían sentido en este mundo de extremos, sin embargo, creo que al menos merecería la pena intentar que los fascistas fueran más anarquistas y los anarquistas más fascistas. Al menos, quizás alguna vez, encontrarían (encontraríamos) una dirección consensuada hacia la que dirigirse.

3 comentarios:

J.RUBINES dijo...

Creo que todos pasamos por situaciones así, en las que de repente todo, absolutamente todo parece que sale mal. Yo soy de los que opinan que todo es pasajero. Los días pasan y las sonrisas acaban volviendo. La felicidad no es un estado de ánimo, sino un estado de consciencia. Buscar lo mejor de ti te ayuda a olvidar esta vida tan extraña. Un abrazo y animate!!!

Anónimo dijo...

Afortunademente entre todos los extremos imaginales hay un infinito de posibilidades que se despliegan ante nosotros.Es lo que nos hace diferentes aunque compartamos la misma dirección.

J.RUBINES dijo...

Cierto! qué aburrido sería todo si todos fueramos iguales. Incluso si todos fueramos en la misma dirección.
Gracias Iceman por el comentario!