19 septiembre 2006

CUATRO FORMAS

La BBC juntó en su día cuatro películas en un documental: Armagedon, El día de mañana, Estallido y Pánico nuclear. Bajo el título de “Cuatro formas de acabar con el mundo”, se narraba de forma correcta y se puede decir que hasta entretenida cuatro formas de que los humanos desaparecieran de este planeta azul. Siendo meticulosos, hay un aspecto muy importante de la cinta con la que no estoy de acuerdo: el título. Por el enfoque, debería titularse: “Cuatro formas rápidas de acabar con los humanos”, porque que yo sepa, la actividad que realizamos actualmente también está acabando con el planeta, y por otro lado, acabando con nosotros no significa que se acabe el mundo.

18 septiembre 2006

COMPAÑEROS DE PISO

Mi amigo Ametzkaitz me mandó el otro día una noticia por mail. No niego que me reí un buen rato, pensando en lo disparatado del asunto, sin creerme aquella paródica situación. Días después descubrí que aquellos ridículos párrafos eran verdad. No soy capaz de llegar a ninguna conclusión de esta gansada, pero desde luego, mis compis de piso me pueden pedir dinero, mangar la leche, dejarse levantada la tapa del water, saltarse el turno de limpieza o despertarme con Heavy Metal los fines de semana. Ahora cualquier cosa de esas me parece una tontería. Ya sabeis: “Tened cuidado con vuestros compañeros de piso”.

IKEA

El nuevo catalogo de Ikea irrumpe en la sociedad. Por 3 euros puede usted disfrutar de innumerables posibilidades de decoración de interiores. Puede ser (no soy ni mucho menos un experto en muebles), que los productos de esta macrotienda sean competentes, y un simple vistazo al catálogo llene tu mente de posibilidades. Sin embargo, aun habiendo sofás para ponerte cómodo a ver la tele, habitaciones con príncipes azules o camas para tirarte a hablar con los amigos, ninguna de esas perspectivas caben en un piso de alquiler o una hipoteca ajustada. El mundo de la decoración sólo sabe de cifras con tres ceros, lo que para muchos es aún un sueño inalcanzable.
Por cierto, sabeís que el catálogo de Ikea ha sido más veces impresos que la biblia.