El nuevo catalogo de Ikea irrumpe en la sociedad. Por 3 euros puede usted disfrutar de innumerables posibilidades de decoración de interiores. Puede ser (no soy ni mucho menos un experto en muebles), que los productos de esta macrotienda sean competentes, y un simple vistazo al catálogo llene tu mente de posibilidades. Sin embargo, aun habiendo sofás para ponerte cómodo a ver la tele, habitaciones con príncipes azules o camas para tirarte a hablar con los amigos, ninguna de esas perspectivas caben en un piso de alquiler o una hipoteca ajustada. El mundo de la decoración sólo sabe de cifras con tres ceros, lo que para muchos es aún un sueño inalcanzable. Por cierto, sabeís que el catálogo de Ikea ha sido más veces impresos que la biblia.